Un poco de mi historia

Mi nombre es Evelina Spina,
aunque me di a conocer por mi apodo de cariño: Eva.

Nací en Santa Fe, Argentina en 1984.  Crecí en mi ciudad de origen, donde se fue dando poco a poco mi desarrollo como Médium, aunque hoy me defino como Traductor Psíquica. Ampliaré más adelante sobre eso. 

La capacidad psíquica o sensible (como me gusta nombrarla) sucedió de pequeña pero no fue hasta los 27 años que pude tener aceptación por ella. Tuve dos hijos y podría decir que sus llegadas a mi vida marcaron un antes y un después en mi relación con la percepción y la fe. A medida que fui creciendo los eventos conocidos como “paranormales” aumentaron en número y en forma,  hasta que fue imposible seguir negandolos. 

La vida y la muerte me llevaron al borde de la aceptación. Me invitaron a mirar de frente el misterio.

Las secuencias de ver, sentir o escuchar espíritus empezaron a mostrarse con tanta fuerza que entendí que lo que sucedía no solo tenía que ver conmigo, sino que era algo más grande.  Se manifestaba para que pudiera ponerlo al servicio. 

Desde el año 2013 me di permiso a confiar en lo que parecía no tener lógica. Me anime a dar los mensajes que recibía desde el más allá y a canalizar las energías que se presentaban.

A partir de esa instancia de aceptación lo que sucedió trajo crecimiento y expansión. Miles de personas han pasado por el consultorio de aquel local de Arroyo Seco, “Hijas de la Luna”. 



En 2020, con la masividad de la virtualidad, creció mi labor exponencialmente y  comenzaron a llegar  personas de todo el mundo, tanto a mis sesiones como a los seminarios sobre Mediumnidad y Akasha. En ese  mismo año, canalice dos de mis espacios grupales que son como  estrellas: Mediúmnica, escuela de médiums, y Akáshica, laboratorio astral. Muchas personas atravesaron aquellos procesos de teoría y práctica sobre estos saberes ancestrales esotericos. 

En 2023 salió a la luz mi primer libro, “Medium”, publicado por la editorial Penguin Random House. 



Actualmente vivo en Italia y continuo compartiendo espacios individuales y grupales de manera digital y presencial, como los círculos psíquicos o  las presentaciones “Desde el más allá” y “Metamorfosis”.

Siento que nací médium para poder traducir el campo sensible del cual somos parte. Para llevar los mensajes en el momento indicado y  recordar (y recordarme) que esta vida es una escuela para el alma, porque como ya lo dijo el libro UCDM, el espíritu  se mantiene eternamente en estado de gracia. 

Gracias por leerme.